El fenómeno del nearshoring ha adquirido una relevancia significativa en el escenario económico actual, especialmente en el contexto mexicano.
La reconfiguración de las cadenas de suministro y la llegada de inversión extranjera directa han generado un cambio notable en la dinámica industrial del país.
Sin embargo, este proceso no está exento de desafíos. En este artículo, exploraremos los retos que enfrenta el panorama del nearshoring en México.
Índice
Desafíos en la infraestructura para el nearshoring
Ampliación de redes y estímulos fiscales
Perspectivas y crecimiento futuro
Jonathan Pomerantz, director de desarrollo de negocios en Meor, destaca un déficit considerable de espacio industrial, estimado en 13,000 millones de metros cuadrados, indispensable para el desarrollo del nearshoring.
Además, la necesidad de puertos de entrada terrestres, marítimos y aéreos se vuelve imperativa para facilitar el traslado eficiente de mercancías.
El Consejo Mexicano de la Energía (Comener) ha urgido la necesidad de agilizar los permisos necesarios para el desarrollo del sector energético, incluyendo la generación y distribución de energía eléctrica, fuentes de energías renovables y suministro de agua.
Estos aspectos son fundamentales para satisfacer las demandas de las empresas que buscan establecerse en México como parte del proceso de nearshoring.
La expansión de redes de infraestructura es un aspecto crucial para el éxito del nearshoring en México. En este sentido, el decreto que otorga estímulos fiscales a la industria exportadora es un paso significativo.
No obstante, se requiere una complementación con medidas adicionales, como la agilización en el otorgamiento de permisos por parte de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para la generación de energía eléctrica convencional y renovable.
Javier Mundo, socio de KPMG México, resalta la importancia de abordar la dependencia de México en las importaciones de gas natural, y cómo un enfoque estratégico debe considerar la producción local para satisfacer la demanda futura.
Según la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP), el 63% de los proyectos de nearshoring registrados provienen de economías asiáticas como China, Corea del Sur y Taiwán.
Este impulso ha llevado a proyecciones alentadoras, esperando nuevas inversiones con la instalación de aproximadamente 227 nuevas empresas anualmente entre 2023 y 2025.
Además, se anticipa un crecimiento significativo en el espacio industrial, inmobiliario y logístico, con estimaciones que sugieren la generación de alrededor de 60 millones de pies cuadrados de nuevos espacios industriales.
Esta expansión se concentrará principalmente en la frontera norte del país, donde se prevé una alta demanda impulsada por las inversiones extranjeras en México.
El avance del nearshoring representa una oportunidad prometedora para el fortalecimiento económico y la atracción de inversiones en México.
No obstante, es imperativo abordar los desafíos relacionados con la infraestructura, la agilización de permisos y la dependencia de importaciones.
El país se encuentra en una posición privilegiada para consolidarse como un punto clave en la reconfiguración de las cadenas de suministro a nivel global, siempre y cuando se tomen medidas estratégicas y se enfrenten estos retos de manera efectiva.
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Fuente: Mexico Industry